Muchas veces he oído comentarios o he leído noticias en las que se comentan que los padres regalan prótesis de mamas a sus hijas adolescentes para sacar buenas notas. En mi experiencia esto es un mito. Los casos de jóvenes menores de edad que solicitan tratamiento del pecho son casos extremos y que afectan gravemente a su autoestima e inicio de relaciones de pareja.
Habitualmente son alteraciones en el desarrollo del pecho: asimetrías graves, mamas tuberosas con falta de desarrollo o hipoplasías (falta de crecimiento del pecho) exagerados. En estos casos se puede plantear cirugía reparadora. Siempre mejor esperar al máximo, que la joven y el pecho se desarrollen lo más posible. No lo aconsejo antes de los 16 o 17 años aunque depende de cómo esté la persona evolucionada hormonalmente.
Se plantea como una cirugía reparadora. No conseguir un gran volumen de mamas, sino dos pechos lo más simétricos posibles, redondos y con buena forma. Posiblemente con los años y los cambios corporales hay una nueva cirugía para volver a simetrizar.
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