Las nuevas técnicas de lipofilling permiten llenar defectos con grasa propia. Mediante una pequeña liposucción extrae grasa y se filtra, consiguiendo así un material propio y consistente, útil para llenar defectos, asimetrías o ganar pequeños volúmenes en las mamas.

En pacientes con prótesis que provocan irregularidades en la piel, la grasa puede enmascarar el implante, y redondear los bordes, dando un aspecto más natural. También en zonas de cicatrices pegadas, principalmente después de tratamiento de tumores, la grasa ayuda a recuperar el contorno original. Pueden ser necesarias varias sesiones, ya que una parte de la grasa inyectada se puede reabsorber de forma variable.